La lana de alpaca pertenece a las denominadas fibras “nobles” y está considerada como uno de los tejidos más lujosos del mundo. Sus características son, entre otras, las siguientes:
- Resistencia y elasticidad: La lana de alpaca es elástica y extremadamente resistente, siendo tres veces más resistente que la lana de oveja (y todo ello a pesar de la finura de su pelo). Como consecuencia de su resistencia, son productos muy resistentes, logrando prendas duraderas en el tiempo que no se ven afectadas por hongos y otros microorganismos. ¡Muchas de las momias peruanas de más de 2500 años descubiertas aún conservaban las prendas de alpaca con las que se fueron a conocer a Viracocha, dios creador de la civilización inca!
- Suavidad y liviandad: La finura de la fibra de alpaca, que puede llegar a medir puede medir entre los 12 y 28 micrones, la hace muy suave al tacto. Es una fibra sedosa y brillante, que no pierde el brillo después de los teñidos y lavado.
- Propiedades térmicas: La fibra de alpaca tiene excelentes cualidades aislantes y térmicas. Esto es así por tener bolsas de aire microscópicas en el interior, que a su vez hacen los productos muy livianos. De tal forma, mantiene muy bien la temperatura corporal independientemente de las condiciones externas y del tipo de ambiente que haya. Ayuda a combatir los cambios bruscos de temperatura y conserva el calor pero, a la vez, es muy transpirable.
- Colorido: la lana de alpaca cuenta con una amplia gama de colores naturales, algo poco frecuente en otras lanas. Además, es muy fácil de teñir.
- Textura visual: La fibra de alpaca tiene un brillo sedoso que se mantienen pese a la producción, teñido o lavado. Especialmente para las capas y los abrigos, la tela tiene una excelente caída, apariencia, brillo natural y tacto, manteniéndose inalterable a través del tiempo.
- No produce alergia: La fibra de alpaca es hipo alergénica, no contiene grasa, aceite o lanolina, resultando muy adecuada para las pieles delicadas y sensibles.
- Propiedades ignífugas e higroscópicas: La fibra de alpaca es muy resistente a la radicación solar y al calor y, a su vez, apenas absorbe la humedad ambiental y repele muy bien el agua. Esta última propiedad hace que si llueve o se moja su aspecto, forma y calidad no se vean afectados.